martes, diciembre 25

Está "buscando"

Pagué 3 por entrar aquí. Podrían haber sido 4, eso valía después de las 2, son más de las 2. Hubo que convencer al tipo de la puerta. Lo que quiero decir es que no fue fácil. Iba caminando por la alameda y me daba paja por anticipado. Creo que fue peor de lo que temía.

El dj que toca vino desde Buenos Aires y es "seco", me dice un tipo vestido con jeans y camisa a cuadros, es seco, me lo repite una y otra vez con el mismo acento que Franzani en comercial de multitienda.

Me llamo Julián, dejémoslo en eso.

Entré a este lugar porque buscaba a una mujer, siempre estoy buscando a una mujer. Suelo entenderme mientras escribo (a veces también me pasa hablando), me perdonarán, pero comprendo cosas sobre mí cuando estoy tecleando y me da por meterlas al texto: busco una mujer ideal que tengo en la cabeza. Tal como esa mierda que seguro alguna vez te han preguntado ¿tienes una mujer ideal? pues yo la tengo, lo malo es que no soy capaz de describirla, ni a mi mismo ni mucho menos aquí. Lo peor es que parece que siempre es otra.

Bien, estoy buscando a una mujer y como no existe realmente, me confundo y persigo pedazos de ella que aparecen y desaparecen en los ojos de una, en las caderas de otra, en la forma en que cuenta historias una tercera, fragmentos.

Hace un rato iba por la alameda y venía mirando desde lejos a una pensando en que me gustaba. Había en ella un fragmento de esa mujer que yo busco, y al rato me di cuenta de que era j. Me impresiona eso, ¿será un principio de alzheimer?, que a veces me paso minutos observando los rostros de gente que conozco hace mucho, como si fuera la primera vez que les veo.

J me dijo que fuera a una fiesta a la que ella iba, me dijo que sería bueno que bailáramos un rato. Yo de j no quiero escribir mucho. Han pasado unos 6 meses desde la última vez que la vi. Me sentí triste cuando descubrí que era j, ni una gota de felicidad por verla.

Ahora que estoy frente al dj me parece mucho menos de lo prometido, hace su trabajo con el mismo gesto facial que han puesto algunas mujeres que exageran en la cama, se muerde los labios por ejemplo. Los remixes de canciones ochenteras no funcionan esta vez.

No se puede confiar en un tipo que imita a Franzani.

Como en realidad no sé si j va estar o no, quiero prepararme un vodka, se trata de estar listo para improvisar. En la barra, justo al lado mío, una mujer alta, muy blanca, con pelo muy negro y los labios muy rojos tiene dos cortos de ron y una lata de cocacola entre manos, pasan una y otra vez su tarjeta por redcompra y se lee "monto insuficiente", ella me pregunta si hay algún cajero cerca porque la máquina debe estar mala. No contesto y no parece importunarle mi silencio, sin soltar los vasos continúa explicando que sí tiene fondos y que todo debe estar malo. Yo realmente no le creo. Le pago sus rones, me pido mi vodka y decido irme del lugar, cruzo puerta tras puerta escondiendo el vaso hasta amunategui.

Estoy en la calle. Me siento feliz. Estrello mi trofeo en un renault Clio, explota el vaso y luego el vodka se chorrea por el parabrisas, por el capó, por las ruedas.

A veces creo que algo piensa por mí, en ocasiones ni siquiera me consulta y toma decisiones, elige cosas sin reparar en mis legítimos intereses.

Download http://cce.uchile.cl/~cemda/canciones/somevelvet.mp3

4 comentarios:

kany dijo...

Somos 2.
Ojala y el 2008 nos espere menos disociados a ambos,je
besos

mahatu dijo...

uno busca lleno de esperanza

La Coty! dijo...

Yo tb busco a un hombre ke esta en mi cabeza, pero a cada rato me doy cuenta que no existe en realidad... en fin... me gustó tu blog =)

Saludox!!!
nos leemos¿?
Coty! =)

Carol, Lur, o llámame algo bonito xD dijo...

Igual es que las mujeres ideales también buscan hombres ideales,
y claro, sólo se encuentran en sueños,
y nos sueñan, haciendo lo que les da la real gana.