Tercera persona egocéntrica

Y ahora le ven. Hoy le observan con admiración, se enternecen, se enojan mirándole. Algunos se conmueven y un pequeño grupo pretencioso aparenta indiferencia, aparenta sí, porque ya no pueden ignorarle.

Si lo pensamos un poco, en realidad nunca pudieron, es sólo que antes, un tiempo antes, estaban ciegos. Y ahora le ven. Ahora le ven. ¿Se entiende no?

Le ven bien.

¿Y despúes?.

No se puede saber qué ocurrirá, así ha sido siempre, no nos engañemos.

Eso si, me gustaría decir que muchos creerán conocerle, pero sólo algunos llegarán a conocerle y unos pocos, estos sí que serán pocos, podrán dejar que les conozca, me refiero a que muchos se mostrarán sí, pero pocos, realmente pocos, tendrán oportunidad de dejarse ver.

De quienes le desnudarán se sabe casi nada, aunque como última especulación, alguna concordancia tendrá con quienes se desnuden en su presencia.